Modelo Montessori vs. Sistema Tradicional.

Karla Cravioto, Estudiante de Psicología Clínica en la Universidad de las Américas Puebla.

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El siguiente artículo pretende dar a conocer las características y lineamientos que rigen al sistema tradicional y al modelo Montessori desde una perspectiva psicoeducativa que pretende dar a conocer las ventajas y desventajas de ambos modelos.

Sistema tradicional

Surge del sistema Prusiano el cual se basa en un conjunto de trabajadores expertos en el tema, sin embargo, requieren un perfil obediente y dócil. No existe libertad entre los estudiantes, los alumnos deben responder a tareas y proyectos con bases estructuradas que rige la misma profesora. El grado que cursan los niños está basado por su edad, es decir, el mismo año de nacimiento, lo cual genera grupos homogéneos.

Dentro del aula el ambiente no es especializado para los niños, el salón de clases es ordinario y da lugar únicamente al profesor o instructor como autoridad convirtiéndolo en el papel activo dentro del salón, y volviendo al aprendiz una persona con un papel pasivo dentro del aula. El mecanismo de enseñanza tradicional da lugar a incentivos sobre los estudiantes, técnica conocida como: “premio y castigo”, el cual establece como premio el obtener un diez, o un incentivo positivo que no cualquier otro estudiante será capaz de tener fácilmente, y al castigo como la consecuencia negativa al no respetar, alcanzar o concluir las instrucciones dadas por el profesor, por ejemplo, una calificación reprobatoria, una suspensión, notas negativas llamativas en el material de trabajo, entre otros.

Método Montessori

Fundando por María Montessori, planteó que encontrar y lograr la paz debe ser a través de la educación con el fin último de lograr que el hombre cree la mejor versión de sí mismo. Este sistema está basado en la libertad, es decir, el alumno es libre de trabajar el tema de su elección, así mismo de elegir qué hacer, qué actividad realizar y el tiempo para su realización.

El método de trabajo es dividido en grupos establecidos por márgenes de diferentes edades (de tres en tres años), es decir, de 0 a 3, de 3 a 6, de 6 a 9, 9 a 12, los cuales no son herméticos ni aislados entre los mismos, sino todo lo contrario, entre grupos existe comunicación, a lo cual se le denomina grupos heterogéneos. Así mismo, dentro del salón el ambiente se procura esté preparado, en cuanto a los materiales que pueden utilizar, áreas habilitadas para la edad de los infantes que trabajan dentro de ella, facilitando así que el niño trabaje por sí mismo.

En la educación Montessori el niño es el protagonista activo y el profesor es un guía que prepara el ambiente para que el niño descubra el conocimiento y explote su máximo potencial. Los niños por naturalidad tienen necesidad de aprender, los niños adquieren satisfacción al aprender, este método no maneja incentivos, al contrario, desarrolla la pasión por aprender únicamente facilitando los mecanismos para hacerlo (H. Medina, 2015).

Conclusión

Con frecuencia los responsables de la educación se cuestionan el mal rendimiento académico y los problemas en la retención del conocimiento de los estudiantes, la mayoría de las veces les resulta complicado aceptar y entender que son los profesores quienes tienen ausencia parcial o total de los distintos modelos educativos y lo eficaces que son las técnicas de enseñanza que podrían emplearse para los alumnos. Es por eso que resulta importante que los profesores sepan empatizar con los estudiantes aprendiendo a través de la información reportada en este trabajo, la cual plasma las teorías y los modelos para instruir y guiar a los alumnos.

Por ende, para apoyar a las instituciones académicas es primordial que los académicos sean instruidos por expertos de la psicología educativa o investigadores del mismo perfil y así, vean a los modelos actuales con la misma importancia y practicidad que los modelos tradicionales empleados por largas décadas dentro del perfil educativo.

Ante cualquier situación de mala praxis que provoque un desarrollo deficiente ya su vez, resultados negativos de los alumnos, es recomendable es emplear las nuevas técnicas, ya sean conductistas, cognitivistas y/o constructivistas que alineen, perfeccionen y den como resultado obtención de una buena retención de conocimientos o aprendizaje que a su vez reflejen una mejoría notoria en los resultados de los aprendices.

Referencias:

D. H. Schunk; 2012, 6° edición; “Teorías del aprendizaje, una perspectiva educativa”. Editorial Pearson Educación, México.